domingo, 7 de diciembre de 2008

Problemas de tránsito de Quito: crónica de un desastre anunciado


De la congestión vehicular..........
El formato longitudinal y estrecho de la capital ecuatoriana, sumado a un incontrolado ingreso de parque automotor de todo tipo, produce serios problemas congestionamientos en el transito motorizado de la urbe que en breve -quizás en este mismo mes de diciembre de 2008- podrían llevar al colapso.

Todos quienes lo tienen quieren sacar su vehiculo a rodar y mientras manejan y se mueven lentamente proclaman a voz en cuello: “la ciudad ya no resiste más, algo hay que hacer” y mientras tanto, una leve neblina de contaminación pende sobre la ciudad y el aire que se respira ya no es tan puro como en el pasado.

En grandes urbes del mundo la gente no se avergüenza de utilizar los medios masivos de transporte urbano, dejando sus vehículos particulares en casa o en grandes playas de estacionamiento. Así se descongestionan en algo las ciudades, aunque siempre perviven aquellos que consideran al vehiculo propio un signo de status.

En otras ciudades se aplica la modalidad de limitar la circulación de vehículos particulares, mediante el último digito de su placa o registro. Los vehículos con numeración par circulan un día y al otro día aquellos con numeración impar y solo los fines de semana transitan unos y otros.

En otras ciudades el uso de la bicicleta es común y corriente, es costumbre llevar pasajeros en autos particulares o la gente camina al menos en tramos cortos, pero la ciudadanía es respetuosa y organizada y cualquier medida que se adopte es acatada porque se entiende a la perfección que aquello que se busca es el bienestar de todos.

En ciudades como la nuestra el caos es moneda diaria, no solo en el transito motorizado sino en todas las actividades. Este blog quiere contribuir a buscar una solución rápida al problema que se está viviendo. Las soluciones a largo plazo también deben encararse porque una y otros sin imprescindibles.

Problema que se agrava

En julio pasado, durante un foro radial, el problema fue analizado por Roque Sevilla, ex alcalde de Quito; Juan Pablo Chauvin, catedrático de la FLACSO; y Vicente Cadena de la empresa de Desarrollo Urbano de Quito (Innovar.Uio), habiendo coincidido que se agrava cada día que pasa.

Los motivos son diversos, el crecimiento de la ciudad, mayor número de habitantes, excesivo número de autos, aumento de las distancias entre las áreas residenciales y las zonas de empleo, y comercio, además de un limitado crecimiento vial y un cuestionable servicio de transporte público. Lo que provoca molestias a la gente, problemas de congestión, tiempo excesivo para movilizarse, sectores sin servicio, contaminación y más.

Todo esto ocurre pese a que desde 2002, en Quito está vigente el Plan Maestro de Transporte que tiene la misión de asegurar a la ciudadanía de un Sistema de Transporte “eficiente confiable, equitativo, seguro y menos contaminante que aumente la productividad y mejore el nivel de vida”.

Las propuestas de solución son tan diversas como los problemas mismos. Hay quienes hablan del tren subterráneo, del tren elevado, el tren rápido, el plan pico y placa, y no falta quien propone que se prohíba la importación de vehículos.El ex alcalde Roque Sevilla, señaló que la única manera de solucionar en el largo plazo los problemas del tránsito en Quito es crear un transporte público de buena calidad y que sea una alternativa frente al uso de los autos propios.

Durante cinco años en Quito se ha dado poca importancia al transporte público, dijo Sevilla, al señalar que también falta “políticas drásticas” para terminar, por ejemplo, con el parqueo en las vías. También hace falta, dijo, una administración de flujos de tránsito, un buen manejo del sistema de semaforización, controles técnicos e infraestructura, como parqueaderos y vías para el transporte, para los peatones y ciclovías.

Juan Pablo Chauvin, cree que la prioridad debe ser el transporte público, porque está demostrado que los años 90 el Trolebús mejoró ese servicio. Sin embargo, no se adoptaron otra medidas de largo plazo. Un aspecto importante, según Chauvin, explica que las autoridades también deben trabajar en el ordenamiento territorial, lo que tiene relación con “la no movilidad”, lo que permite reducir la necesidad de moverse de la gente. En ciertos sectores de la ciudad se concentran oficinas públicas, privadas y colegios.

Entre las alternativas que se plantean para solucionar el problema del tránsito en Quito está la construcción de un tren rápido. La iniciativa que es promovida por Innovar UIO, y según los estudios preliminares el costo sería de 800 millones de dólares en un trayecto de 27 kilómetros, explicó Vicente Cadena.El tren ligero pretende mejorar todo el tráfico y la transportación de pasajeros entre los dos extremos de la ciudad. “Esta sería en una solución de transportación masiva, de mayor velocidad comercial, más comodidad y capacidad, en corredor importante para la ciudad”, señaló Cadena.

Según Sevilla, el tren ligero es una medida ideal de transportación y sería una solución para la ciudad, pero su costo es muy alto. Cada kilómetro del tren ligero tendría un costo aproximado de 30 millones. Cree que primero debería construirse un sistema de trolebuses para toda la ciudad. El tiempo de transportación en Quito ha subido de manera dramática y los sectores menos favorecidos son los más afectados. Para movilizarse desde el extremo sur hasta el extremo norte de la capital se requieren hasta dos horas y media, y similar tiempo toma para regresar. Por tanto la ineficiencia del transporte provoca la pérdida de miles de horas. Sevilla cree que “deben abrirse corredores de transportación masiva eficientes y seguros”.

También se deben tomar en cuenta el costo de los combustibles, y los prolongados recorridos que hace los niños y jóvenes estudiantes para asistir a un colegio o escuela. Chauvín, explicó que para aliviar el tránsito en Quito deben adoptarse varias medias a la vez. Una alternativa es el plan pico y placa, pero también se multiplica el número de usuarios de transporte privado. Es necesario, dijo, tomar en cuenta las necesidades de la mayoría de la población. Quito tiene más de 40 Km. de largo y en sectores como el Centro Histórico tiene tramos complejos con menos de 3 Km. de ancho, por donde pasan cuatro vías que están sobresaturadas y colapsan la circulación norte sur. Además, la capital ecuatoriana tiene tres ciudades satélites: el Valle de los Chillos, Cumbayá-Tumbaco y San Antonio de Pichincha, todas unidas por vías muy endebles, explicó Roque Sevilla.

......a la de pasajeros, hay un solo paso

Transporte masivo
Un informe de prensa publicado en mayo dijo que la Municipalidad busca promover para Quito un sistema de transporte masivo. En 1990 la comuna asumió la competencia del tránsito y transporte y en 1996 se inauguró el Trolebús, como el primer sistema de transporte masivo. En 2006 se registró el más alto índice de mortalidad por accidentes de tránsito y en 2007, el CNT perdió 575 millones de dólares por accidentes de tránsito.

La aplicación de un Plan de Viabilidad en Quito sería la solución para evitar los problemas de tránsito y reducir accidentes y muertes en las vías, afirmó Hidalgo Núñez, director de Transporte del Municipio de Quito. Para aplicar una posible solución se tomaron en cuenta varias alternativas a corto, mediano y largo plazo, como la construcción del tren rápido, una ciclovía y el desarrollo de campañas de educación masiva, para concienciar y motivar el uso de transporte público y ecológico como las bicicletas.

Por el momento, la Municipalidad ha implementado varios proyectos para optimizar la viabilidad del tránsito, mejorar la seguridad para los pasajeros y evitar las muertes por accidentes en las vías.Entre los proyectos elaborados se establecen las nuevas rutas para los buses alimentadores, incentivos con recorridos gratuitos para los pasajeros y extensiones de las rutas de transporte en los corredores de la Ecovía, Trolebús y Metrobus, informó Núñez.

Además se tiene previsto presentar el proyecto del Plan de Movilidad para Quito, que será llevado al debate público.
Víctor Jiménez, director ejecutivo de Covial, afirmó que el problema del caos vehicular y la mortalidad en las calles no se solucionan con ‘mega proyectos’ sino con educación para la población, tanto al usuario del transporte público y privado.
“Porque los grandes proyectos de viabilidad para Quito requieren de inversión, atención del Gobierno Central y de tiempo, mientras tanto hay que buscar soluciones inmediatas”.

Para el transporte público se requiere agilidad, comodidad y seguridad, mientras que para el transporte privado se incentivará, a través de una encuesta y simulacros, la aplicación de la campaña pico y placa, con lo que se reducirá el 50 por ciento del parque automotor en las calles y se estudiará el proyecto de ‘chatarrización’ para evitar que carros viejos circulen en la ciudad.

Guillermo Abad, presidente de Justicia Vial, estableció que Quito actualmente pierde siete millones de dólares al año, solo por mantener el tránsito. Si el cálculo es geométrico se concluye que el siguiente año perderá 14 millones de dólares, y el próximo 28 millones dólares.

Juan Pablo Chauvín, experto en temas de tránsito de Quito, en un informe realizado para la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), planteó que el exceso de transporte privado copa el espacio de las vías públicas, porque en un vehículo particular el cupo máximo de pasajeros es de cinco personas, en el transporte público el cupo es de cuarenta, pese a que solamente ocupa el espacio equivalente a 2 automóviles.

Con diez personas ocupando el mismo espacio que podría ser aprovechado por 40, “no sorprenden los problemas de saturación de las calles y cada vez más largos tiempos de traslado, con las consecuentes pérdidas económicas”, expresó Chauvín.

Los Editores

consultoresasociados200704@gmail.com

1 comentario:

Anónimo dijo...

No se esfuerzen tanto en diagnosticar los problemas que TODOS SABEMOS, la soluciòn real consiste en aplicar verdaderas polìticas de sanciones a violadores permanentes de la ley (buses, taxis, y muchos particulares)que no les pasa nada cuando infringen la misma, y que muchos estaríamos dispuestos a dejar el vehículo en la casa si existiera un transporte público decente que no consuma, como es el actual caso 1, 1,5 o 2 horas para transportarnos en horas pico. Decisiones POLITICAS faltan, soluciones técnicas sobran.